Antes de explicar mis motivos, primero definiré esta ley que no tiene nada de verídica a mi parecer. La Ley de la Atracción no dice más que “mediante el pensamiento es posible atraer lo deseado” (Sí, claro), más verídico podría sonar que las raíces de esta ley están arraigadas a la física cuántica ya que los pensamientos tienen una energía que genera una energía similar (Modo sarcasmo: activado)
- Saber qué es lo que uno quiere y pedirlo al universo o a Dios.
- Enfocar pensamientos de uno mismo sobre el objeto deseado con entusiasmo.
- Sentir o comportarse como si el objeto deseado ya hubiera sido obtenido.
- Estar abierto a recibirlo
Suena muy alentador pensar que todo el universo conspirará para recibir lo que te propones, más todavía el hecho que con fe lograrás que Dios, Alá o cualquier otra deidad, hará que se te cumplan tus deseos.
¿Pero qué pasa cuando no se cumple? Algunos dirán que no estaba escrito, que el “Tiempo de Dios es perfecto ¿Por qué alguien o algo más debe tener control de nuestras vidas? ¿Por qué nosotros mismos no podemos luchar por conseguirlo?
Trabajo y constancia son las principales claves para que por tu propia cuenta, logres lo que te propongas. Nadie más que tú mismo puede hacer que se cumplan tus metas, y no necesitas el permiso de nadie, ni la voluntad de nadie. El universo es vasto, inmenso y sigue expandiéndose, ¿habrá motivos para que este mismo universo quiera prestar especial atención a un ser que vive dentro de un planeta tan pequeño, dentro de una galaxia que podría perderse entre supernovas?
Sé que nada de lo que te he dicho suena alentador, pero el aliento que necesitas del universo está dentro de ti, de tu propio universo y nada externo, por muy grande o poderoso que sea, hará más de lo que tú puedes hacer por tu cuenta. Confía en ti, tus talentos y habilidades, tu trabajo y tu constancia son las que atraerán eso que tanto deseas.