Sí, como la canción de Meghan Trainor.

Quiero escribirte estas líneas para expresarte todo lo que espero de tí y lo que quiero que esperes de mí. Estas líneas quiero dedicarlas a mis más profundos anhelos de niña, de encontrar a ese príncipe, a ese caballero que lucharía por mí en las peores batallas y que esperaría al ocaso en mi castillo.

Más que como la misma canción, la cual sinceramente me parece bastante superficial, te anhelo de una manera bastante especial, busco tu presencia todos los días y te encuentro hasta en mi subconsciente. Te pienso siempre y quiero ser lo mejor que pueda para tí.

Quiero atender tus necesidades, consentirte cada vez que estés estresado por el trabajo, hablarte bonito para que olvides tus problemas, irnos juntos a la cama y consentirte. Quiero que me escuches cuando tenga un problema, que me digas que todo estará bien mientras me abrazas y acaricies suavemente mi cabello.

Quiero que te alegres por mis logros y que me admires por mi capacidad intelectual, que sonrías silenciosamente cada vez que intento buscarle la lógica a todo, aún cuando hablemos del tema más superfluo del mundo.

Quiero ser esa primera persona en la que pienses cuando tengas un problema. Quiero escucharte hablar de tus aficiones y tus responsabilidades, esas que a veces te abruman por ser demasiadas. Quiero sonreírte, mirarte con mucha ternura y que descanses en mi mirada.

Quiero ser tu compañera de crimen, con quien puedas bromear, reír, cantar, viajar, bailar, hacer las cosas más ordinarias del día a día, esas que sólo conmigo se vuelven extraordinarias. Quiero decirte que vengas a la cama cuando te quedes trabajando hasta tarde y despertarte con mis besos mientras que me dices «5 minutos más».

Quiero sentarme a una mesa contigo en el restaurante más x del mundo a hablar de la Teoría de la Evolución. Quiero que veamos memes sin puto sentido, reír escandalosamente mientras te mueres de la pena; que hablemos de otras comidas mientras comemos, y luego darnos cuenta que somos unos malditos gordos.

Quiero sentirme orgullosa de todas las cosas que has logrado a lo largo de tu vida, sentir que son mis logros también y celebrar juntos. Quiero estar ahí, no sólo en las buenas sino también en las malas (sí, ya sé que es muy cliché), ser tu principal apoyo, consolarte y que mis brazos sean el refugio que necesites en tus peores momentos.

Quiero que me hagas sentir única en el mundo, mirar tus ojos dulces y estar segura de que jamás vas a dejarme ir. Que admires mi inteligencia, mi tenacidad, voluntad y fortaleza. Que también puedas aprender de mis experiencias y sorprenderte cada día con cada vivencia que no te haya contado.

Quiero ser tu musa. Que mi cuerpo sea el único que desees ver desnudo, y que mis caricias sean las únicas que quieras sentir en tu piel. Que al hacer el amor no tengas reparo en dar todo de ti e inspirarme a darte todo de mí, dentro y fuera de las sábanas.

Quiero que nos demos cuenta de lo bien que nos sentimos siendo nosotros mismos y descubrir cosas nuevas de nuestras personalidades, juntos. Quiero abrazarte y sentirme dichosa de estar en mi piel y que tú lo sientas.

Quiero este día, que me mires a los ojos y me digas que me amas, quiero perderme en tu mirada y que tú te encuentres en la mía. Quiero besarte de manera apasionada y sentir que todo desaparece a nuestro alrededor.

Quiero hacer todos mis sueños realidad junto a tí y quiero que también cumplas los tuyos, que, a pesar de las dificultades salgamos adelante y disfrutemos de el éxito de cada quién pero sobre todo de esos pequeños logros del día a día, que incluso, de las cosas más nimias encontremos lo bella que es la vida.

Quiero ser tu mejor amiga, tu compañera… Definitivamente Quiero ser tu futura esposa. Te amo.