Nacer. Crecer. Estudiar. Trabajar. Tener familia. Morir. Y el último punto parece repetirse entre cada uno de los anteriores, advirtiéndonos, apresurándonos, en la frustración por cumplir cada uno de ellos con «éxito» olvidándonos de lo que todos ven como un detalle pero que es lo más importante: ser feliz.
Antes de autoanalizarte y empezar a vivir tus días sin presiones, debes dejar algunos malos hábitos que te frustran y te hacen caer en este ciclo interminable.
No te compares con los demás
Siempre vemos lo que hace el compañero, el amigo, el conocido o incluso en nuestra propia familia. Es un acto inconsciente que poco a poco va frustrándonos sin darnos cuenta, ya que comenzamos a elaborar pensamientos pesimistas y cada vez que queramos llevar algo a cabo, rondará nuestra cabeza constantemente.
Empieza a mirar hacia atrás
Mira todo el camino que has recorrido para estar donde estás. Recuerda cada error, cada lágrima y cada pequeño logro. Esto ha forjado tu carácter y te ha dado la madurez que no tenías al principio del camino. Cuando te des cuenta de que, a pesar de que no fue fácil, has logrado llegar hasta donde estás, es algo que inevitablemente te hará sentir bien. Permítetelo, te lo has ganado.
Pasa el conocimiento
Todo lo que has aprendido hasta este momento es tuyo y nadie puede arrebatártelo. La única forma que hagas que se esparza la semilla es pasando todo ese conocimiento a las personas que te suceden en tus funciones día a día, a tus hermanos pequeños o primos, a tus conocidos, etc. Pero nunca te quedes con el conocimiento si en algún momento puede servirle a alguien más que conozcas.
Pon en orden tu vida
Paga lo que debes, haz tus deberes en casa, tus tareas de la universidad y completa los proyectos que tengas en tu trabajo. Haz una lista con las cosas que tengas que hacer y trata de cumplirla en un máximo de 6 meses, así podrás tener idea de cómo estás económicamente, te hará autoanalizarte acerca del grado de madurez que tengas y sobre todo te proporcionará tranquilidad cumplir con esas metas. Define prioridades y entre cada 3 de ellas, cómprate algo para autofelicitarte.
Escucha a tu corazón
Sí, ya sé que suena súper cliché… Más bien escucha a tu voz interior. Esa que tira pensamientos insofactamente y que, al parecer impulsos, no dices o no les haces caso. Hay veces en las que esta vocecita tiene tanta razón… Sobre todo porque se trata de lo que sientes verdaderamente respecto a lo que sucede a tu alrededor. De igual manera no la calles con las opiniones de los demás, y lucha por lo que quieres diariamente: desde comprarte aquellos jeans rotos hasta elegir la carrera que te llevará a dedicarte a hacer lo que más te gusta el resto de tu vida. No tengas miedo de escucharla de vez en cuando.
No tienes que impresionar a nadie
Sí, es cierto que nos encanta recibir halagos por parte de nuestros seres queridos y ovación de desconocidos, pero todo esto es externo. En realidad lo único que importa es lo que tengas que decir de tí mismo/a: si cumpliste tus metas diarias, si aprendiste algo nuevo, si perfeccionaste tus habilidades e incluso si te equivocaste. Si tú mismo aprendes a darte ánimos, comprenderás que no hay mayor satisfacción que ser mejor cada día por tí mismo.
Consiéntete
Sal de la rutina! Cómprate ropa! Tatúate! Vete a parkear con tus amigos! No todo es responsabilidades… Sí, ya sé que a veces necesitas las horas extras para generar más dinero… Pero ¿y tu tiempo? Es algo que simplemente no regresará y es el mayor regalo que puedes darte a tí mismo (porque lo mereces) y a tus seres queridos. Las responsabilidades nos consumen, y ahora mucho más porque estamos conectados 24/7 así que para que esto no te afecte a la larga, tómate un descanso de vez en cuando.
Sé feliz
Personalmente digo que la felicidad no es un status quo, sino pequeños momentos del día a día que nos dibujan una sonrisa en el rostro. No te afanes, no te apures. Tu momento de absorber todo a tu alrededor es ahora. Tu momento de vivir es ahora, y no te lamentes por el pasado (porque ya pasó), ni te preocupes en el futuro (porque sea como sea, no podrás evitarlo).
Mírate al espejo y analízate, detente a pensar entre tareas y date cuenta que lo que haces diariamente es importante: que es un aporte a la sociedad, a tu patria, a la felicidad de los que quieren verte triunfar pero sobre todo un aporte a tu persona, a tu alma.
Así que sé quien quieras ser y simplemente da todo de tí cada día.
[…] y esfuérzate, reconoce tus debilidades y fortalécete mental y emocionalmente. Mira mi artículo ¡No te presiones! y sigue adelante hasta cumplir tus […]
Me gustaMe gusta