Sí, me lo he planteado últimamente ya que dentro de mi profesión, diseño, las oportunidades cada vez son más minúsculas: es infravalorado, hay demasiada oferta y demanda y además, jodida por quienes por necesidad, ponen el precio de su trabajo por los suelos, afectando a muchos profesionales.
Este tema me afecta directamente a mí, y aunque tengo un trabajo que disfruto mucho y que me ha permitido abrir el compás para crecer profesionalmente, parte de la naturaleza humana es avanzar, evolucionar, crecer y buscar más. No estoy conforme con mis infravalorados talentos, los cuales he dejado un poco de lado quizás por la falta de motivación que me provoca lo poco que se mueve el mercado últimamente.
Tengo 3 años con este blog, 4 años trabajando en gráficos y redacción de noticias deportivas y toda mi vida escribiendo. Siempre tuve un don para el idioma español, la materia quizás más odiada por todos en la escuela, el cual aún recuerdo las preposiciones: a, ante, bajo, cabe, con, contra, de, desde, durante, en, entre, hacia, hasta, para, por, según, si, so, sobre, tras, versus, vía; los análisis morfosintácticos de las oraciones (era una crack en esto), no soporto que las cosas estén mal escritas y siempre corrijo a quienes dicen mal una palabra.
Eso está bastante normal y de hecho existen muchas personas que al igual que yo tienen esta virtud o defecto, depende de cómo lo manejen. Pero lo que realmente me hizo plantearme esta pregunta es el hecho de que me gusta mucho investigar y analizar cualquier tema, plantearme las ideas y compartirlas con las demás personas.
Me gusta compartir información, por muy inútil que sea por ejemplo que Whoopi Goldberg no tiene cejas (sí, esto es 100% real), me gusta transmitir y pasar el conocimiento. Me gusta escudriñar si no sé algo o tengo poco conocimiento de algo y, no me vuelvo una experta, pero constantemente aprendo cosas nuevas, y me gusta. Incluso me gusta más saber que las personas a las que les comparto esta información, hayan entendido mi mensaje y sea de provecho para sus vidas, aunque eso sólo signifique una charla pendeja en una borrachera.
Mi bisabuela fue maestra, mi abuela y mi madre también, y yo nunca me lo había planteado tan en serio como ahora porque sé que tengo cero paciencia con los niños pequeños (amo los bebés pero cuando ya empiezan a hablar, fushila!). Me va mejor enseñándole a mis primos casi adolescentes, a jóvenes y a los practicantes de mi trabajo, ya que no tengo problemas para darme a entender y de verdad me preocupo por ello.

Me gustaría enseñar a la gente a comunicarse, ya que es tan importante viendo que tenemos muchísimos más canales de información y exposición. Siento que es importante aprender a escribir, leer, hablar y discertar bien ya que existen muchos profesionales, genios y dirigentes que no saben expresarse públicamente.
Mientras continúo con mi vida (y espero a que se abra la matrícula del Posgrado), sigo planteándome esta pregunta, porque no quiero tomar una decisión radical en mi carrera y luego arrepentirme. Quisiera mantenerme en mi área, que es comunicación, y de paso aprender mucho más sobre el idioma español incluso sobre otros idiomas… y quién sabe, abrir mucho más el compás a más facetas en mi vida.