Todos cometemos un error al pensar que la piel es igual al papel y que la idea que tengamos, se va a ver igual de nítida en cualquier zona de nuestro cuerpo. ¡Es normal! Yo también coticé tatuajes que al final nunca me hice, precisamente porque no quería botar mi dinero a la basura y hoy quiero darte estos consejos para que tú tampoco lo hagas 🙂

Los dedos
Aunque se vea tierno por los primeros meses, las manos tienen muchas callosidades y el constante rozamiento entre los dedos, hará que se corra la tinta. Lo que parecía algo delicado, pasará a ser una mancha que querrás tapar siempre.
Los labios
Puede parecer divertido pero, además de doloroso, es totalmente innecesario. La boca tiene mucha humedad y esto hará que se te manchen los dientes o que se te borre tarde o temprano.

La cara
A menos que seas cantante de trap o seas tatuador, algo tan osado como tatuarse la cara puede convertirse en una pesadilla. No hablemos de que si será fácil o no conseguir un empleo decente (en estos tiempos, aunque tengas la piel virgen, no es fácil conseguir empleo). Lo que no te cuentan de los tatuajes en la cara es que, al pasar el tiempo, la tinta negra se pondrá verde (o incluso azul) por la exposición constante al sol. Ni hablar de que es sumamente doloroso por lo delicada que es la piel de tu rostro.

La planta de los pies
Otra zona con muchísima callosidad. Y si tienes mal olor (que es normal) o eres especialmente descuidado con la higiene de tus pies, puedes correr un riesgo de infección mayor a que sea, por ejemplo, en zonas como el empeine o el tobillo. ¡Piénsatelo mejor!

Las orejas
¡Todos hemos visto esos tatuajes discretos en las orejas y nos parecen interesantes! Pero, además de ser innecesariamente dolorosos, las orejas tienen mucho cartílago y son muy sensibles. Si tienes más de un par de aretes, seguramente algún huequito te tardó meses en sanar por completo. ¡Ahora imagínate un tattoo!

Si ya habías pensado tatuarte alguna de estas zonas, ¡no pasa nada! Lo importante es que sepas lo que implica para que no te lleves ninguna sorpresa cuando ya esté completamente sanado. 🙂